La mujer en tiempos de guerra o conflicto armado sufre, además de la desigualdad y discriminacion por el hecho de ser mujer, una carga añadida de violencia derivada de la situación de conflicto, lo que impacta en su menor acceso a los recursos, ya sean sanitarios, de alimentación, y todo lo que tiene que ver con procurar su supervivencia y la de sus hijos. Su acceso a la asistencia médica es muy limitado, aún más en momentos en los que su propia salud y la de sus familiares es especialmente frágil. 

En estos duros momentos se producen múltiples violaciones sexuales de mujeres y niñas, convirtiéndose en una estrategia de terror y forma de tortura. Las consecuencias físicas y mentales de estas agresiones dejan huellas psicológicas y físicas imborrables. 

Por otro lado, el cierre de escuelas por el estallido de conflictos armados provoca un aumento de matrimonios forzosos en niñas, que, en su mayoría son menores de edad, por ende, de embarazos precoces, con los riesgos que todo ello conlleva para la salud de la niña. 

En Siria, las consecuencias de la guerra para las mujeres están siendo muy severas. No debemos olvidar que las mujeres suelen ser el sostén de la familia, tras perder a sus maridos, padres y/o hijos. 

Un grupo altamente vulnerable en esta guerra son las mujeres embarazadas, pues se encuentran en riesgo permanente a causa de la malnutrición, la falta de acceso a servicios de obstetricia adecuados, y otros factores. 

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BIBLIOGRAFÍA:

https://www.icrc.org/es/donde-trabajamos/medio-oriente/siria/mujeres

https://www.es.amnesty.org/en-que-estamos/blog/historia/articulo/la-mujer-y-los-conflictos-armados/