De la Ayuda de Emergencia a la Acción Humanitaria
Ana Bisquert, Álvaro Morcillo
Comenzamos en 2012 cuando enviamos el primer contenedor a Siria. A día de hoy, en la A.A.P.S estamos llevando a cabo proyectos de Acción Humanitaria.
Desde que en 2012 enviamos nuestro primer contenedor con ayuda de Emergencia a Siria nos hemos convertido en un importante puente logístico entre Siria y España. Con el tiempo, nos dimos cuenta de las necesidades de este país, en el que la guerra dura ya 9 años, y tomamos la decisión de comenzar a implementar nuevos proyectos de Acción Humanitaria en el norte de Siria.
Nuestra asociación nace con la necesidad de dar visibilidad al conflicto sirio y a las personas desplazadas, así como apoyarles mediante la Ayuda de Emergencia. Actuamos por primera vez en enero de 2012, cuando enviamos el primer contenedor con materiales y productos básicos para la población desplazada siria. Desde ese momento, y durante mucho tiempo, la A.A.P.S. ha sido un puente solidario entre España y Siria y hemos ido creciendo hasta convertirnos en lo que somos ahora.
El envío de contenedores ha sido y es una de las acciones más importantes que desarrollamos en la A.A.P.S. Gracias a ella, la población desplazada siria puede acceder a productos de primera necesidad que se transportan. Desde que empezamos con esta labor hemos enviado 131 contenedores a las personas más necesitadas.
¿Cuáles fueron nuestros inicios?
La aaps surgió con el objetivo de ofrecer Ayuda de Emergencia para paliar los efectos de la situación tan cambiante de la guerra siria que sufrían los civiles.
El envío de contenedores es el alma de la A.A.P.S., nacimos con esta acción.
Con el conflicto armado, una gran parte de la población del país no disponía de productos básicos y servicios esenciales para sobrevivir; como alimentos, medicamentos o abrigo.
Teniendo en cuenta estas carencias, empezamos a enviar provisión de bienes y productos convirtiéndonos en un puente logístico de entrega de ayuda entre España y Siria. Pero el conflicto se alargaba mucho en el tiempo y nos dimos cuenta de la necesidad de seguir ofreciendo más ayuda y en otro formato. Decidimos entonces dar un paso más, siendo conscientes de que trabajamos en un territorio en guerra, pero con el ánimo de proyectar nuestra ayuda de forma más prolongada para poder humildemente, sentar algunas bases para la rehabilitación y desarrollo futuro de la zona. Contando entonces con la viabilidad técnica necesaria comenzamos a formular proyectos de Acción Humanitaria para Siria. De modo que, además de la provisión de bienes y servicios básicos que conseguíamos con la ayuda de emergencia, pasamos a desarrollar operaciones más prolongadas que incluyen la protección de las víctimas y de algunos de sus derechos fundamentales.
En este punto es importante señalar que la acción humanitaria se caracteriza no sólo por llevar a cabo unas determinadas actividades y objetivos, sino también por una serie de principios éticos y operativos resumidos en: la humanidad; la imparcialidad; la neutralidad y la independencia. Además en nuestros proyectos nos ha guiado siempre la Norma Humanitaria Esencial y la aplicación de los ODS. Son las necesidades de las personas desplazadas en el norte de Siria las que rigen nuestra acción humanitaria y no al revés.
De la Ayuda de Emergencia a la Acción Humanitaria
Así, pasamos de la Ayuda de Emergencia a la Acción Humanitaria, centrándonos en los desplazados internos, es decir, aquellas personas a las que la guerra ha obligado a huir de sus casas y que viven ahora en campos de desplazados, soportando unas condiciones de vida muy precarias.
¿Cómo hacemos ahora Acción Humanitaria?
Derecho a al educación
Nuestro objetivo es desarrollar proyectos que protejan los derechos humanos de la población más afectada, como el derecho a recibir educación. Actualmente está en marcha la construcción de dos colegios, Escuela Amal/Esperanza y la Escuela Abrigando Corazones ASACO, “la escuelita”.
Ayuda Psicológica
Además de la educación, muchos de los niños y niñas que se encuentran en estos campos de refugiados requieren ayuda psicológica. Para ello estamos llevando a cabo la campaña de salud mental, que ofrecerá ayuda a más de 2.100 niños y niñas que todavía sufren las consecuencias de la guerra.
La intención es sentar las bases para la rehabilitación y el desarrollo en el posconflicto de los mas pequeños. Es decir, que tengan las herramientas necesarias para construir un futuro mejor y ofrecerles una infancia y una vida digna.
Por otro lado, no hemos abandonado la ayuda de emergencia, seguimos enviando contenedores a los campos de desplazados. Así, hemos hecho llegar a los habitantes de esta zona materiales de primera necesidad, como productos higiénicos y médicos, material escolar o comida sin cerdo no perecedera. Ya hemos alcanzado la cifra récord de 133 contenedores enviados, en los dos últimos se contabilizaron cerca de 300 pupitres y sillas.
Nuestros socios en el terreno nos comunican las necesidades de cada momento y nosotros iniciamos una campaña para recoger los productos requeridos y cargarlos en un contenedor rumbo a Siria.
Desde la A.A.P.S. trabajamos para que toda la gente pueda vivir en unas condiciones dignas. Nuestro objetivo es cubrir las necesidades básicas, el envío de ayuda humanitaria permite a la población que vive en una situación de emergencia de conflicto bélico disponer de productos tan necesarios como comida o medicamentos.